Nuestra
querida y nunca bien ponderada alcaldesa ha renunciado a aprobar el Plan
General de Ordenación Urbana antes de las elecciones municipales «por
falta de tiempo para completar los trámites administrativos, y al considerar
que una cuestión clave para el futuro de la ciudad no puede verse sometida a la
confrontación electoral.»
Desde el Consistorio señalan que “ya no hay tiempo para una
aprobación definitiva antes de mayo. Es muy difícil hacer todo el trabajo en
cuatro años, no se logró ni con el PGOU de 1985 ni con el de 1997, ahora en
vigor, que tardó siete años en tramitarse. Trabajamos muy duro, pero dependemos
de muchas Administraciones”».
Quedan
en el aire la regeneración de Delicias y Villaverde, la creación de bulevares
en las principales vías de Madrid y, sobre todo, el cambio del catálogo de
edificios.
¡Virgencita
que me quede como estoy, pensarán los BIC’s de la ciudad!
¡Que
tengáis un buen martes!
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